INGLATERRA 0-0 ARGELIA 
Aburrido empate a nada
Un bodrio. Eso es lo que hemos vivido con el Inglaterra-Argelia de esta noche. La falta de buen juego en la mayoría de partidos de la 1ª jornada la achacábamos al miedo a perder. Sin embargo, el partido de hoy es un auténtico chasco para los amantes del fútbol. Sin ataques, sin creación, sin bandas, el juego de ambos equipos, en especial de Inglaterra, ha sido decepcionante, aburrido y triste. Ni una muestra de alma han tenido los pross para imponerse a una Argelia igual de preocupante (aunque vencedora a los puntos). Ambos equipos habían pinchado en la 1ª jornada y por la pasión que han puesto hoy parece que no les importa obligarse a ganar el último partido.
Empezó el partido sin ocasiones, pero con los porteros James (que debutó en un Mundial con casi 40 años) y Mbohli (3er portero de la selección) protagonizando jugadas de absoluta inseguridad, que animaban al espectador a pensar que podría caer un gol aunque fuera de rebote o por fallo calamitoso. Pero no fue así, y los porteros no tuvieron mucho trabajo. Si acaso, James recibió bastantes cesiones y pases comprometidos que tuvo que despejar como pudo, y que reflejaban la apatía del juego inglés, fallón en defensa, e inoperante del centro en adelante. Los atacantes Rooney y Heskey fueron lo menos malo del equipo: intentaron trabajar lejos de la portería, y en parte lo consiguieron, pero luego no eran capaces de dar un último pase porque no había nadie.
Llegó el descanso, y Argelia estaba bien situada e incluso era quien gozaba de las contadas ocasiones y jugadas de ataque. La segunda parte seguía igual de espesa, con pocos tiros y en todo caso lanzamientos lejanos. No había ni un mínimo atisbo de jugada hilvanada, ni de chispa, por parte de Inglaterra. Tal vez por eso, Fabio Capello introdujo a Wright-Phillips para buscar algo de desborde, pero se cargó a uno de los que se estaba salvando: Aaron Lennon. Heskey se hartaba a trabajar en la recuperación, pero cuando llegaba al área se nublaba; no sólo él, sino Gerrard, Lampard y toda Inglaterra. Argelia se conformó de manera extraña con el empate (no depende de sí misma para pasar a octavos) e Inglaterra buscó la desesperada metiendo a Peter Crouch.
Pero no hubo manera: el partido se consumió, el juego brilló por su ausencia y, lo que es peor, una favorita como Inglaterra deja aún más dudas que tras el primer partido y ahora necesita ganar a la líder Eslovenia. Argelia se acabó conformando con un empate que no le vale, ya que necesita ganar al menos 2-0 a Estados Unidos y que Eslovenia pierda, aunque si lo hace por más de 1-0, entonces Argelia no necesita marcar dos goles.
Empezó el partido sin ocasiones, pero con los porteros James (que debutó en un Mundial con casi 40 años) y Mbohli (3er portero de la selección) protagonizando jugadas de absoluta inseguridad, que animaban al espectador a pensar que podría caer un gol aunque fuera de rebote o por fallo calamitoso. Pero no fue así, y los porteros no tuvieron mucho trabajo. Si acaso, James recibió bastantes cesiones y pases comprometidos que tuvo que despejar como pudo, y que reflejaban la apatía del juego inglés, fallón en defensa, e inoperante del centro en adelante. Los atacantes Rooney y Heskey fueron lo menos malo del equipo: intentaron trabajar lejos de la portería, y en parte lo consiguieron, pero luego no eran capaces de dar un último pase porque no había nadie.
Llegó el descanso, y Argelia estaba bien situada e incluso era quien gozaba de las contadas ocasiones y jugadas de ataque. La segunda parte seguía igual de espesa, con pocos tiros y en todo caso lanzamientos lejanos. No había ni un mínimo atisbo de jugada hilvanada, ni de chispa, por parte de Inglaterra. Tal vez por eso, Fabio Capello introdujo a Wright-Phillips para buscar algo de desborde, pero se cargó a uno de los que se estaba salvando: Aaron Lennon. Heskey se hartaba a trabajar en la recuperación, pero cuando llegaba al área se nublaba; no sólo él, sino Gerrard, Lampard y toda Inglaterra. Argelia se conformó de manera extraña con el empate (no depende de sí misma para pasar a octavos) e Inglaterra buscó la desesperada metiendo a Peter Crouch.
Pero no hubo manera: el partido se consumió, el juego brilló por su ausencia y, lo que es peor, una favorita como Inglaterra deja aún más dudas que tras el primer partido y ahora necesita ganar a la líder Eslovenia. Argelia se acabó conformando con un empate que no le vale, ya que necesita ganar al menos 2-0 a Estados Unidos y que Eslovenia pierda, aunque si lo hace por más de 1-0, entonces Argelia no necesita marcar dos goles.
Inglaterra:
3- Emile Heskey
2- Ashley Cole
1- Aaron Lennon
Argelia:
3- Madjid Bougherra
2- Nadir Belhadj
1- Karim Ziani
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