jueves, 30 de diciembre de 2010

Zona de prensa. Fuenlabrada-Estudiantes

Luis Casimiro, entrenador Asefa Estudiantes: "Fuenlabrada ha estado más metido en el partido que nosotros"






Salva Maldonado, entrenador Baloncesto Fuenlabrada: "Creo que con 9 victorias no entraremos en la Copa"



Esteban Batista, jugador del Baloncesto Fuenlabrada: "Estamos en una posición en la que dependemos de nosotros mismos"



Jon Cortaberría, jugador del Baloncesto Fuenlabrada: "Seguimos con la ilusión de la copa"


Pancho Jasen, jugador del Asefa Estudiantes: "Estamos jodidos porque era un partido que teníamos que ganar"


Gustavo Ayón, jugador del Baloncesto Fuenlabrada: "Fallamos muchos tiros, pero lo importante es que ganamos"



Fuenlabrada se lleva un derbi muy caliente

Baloncesto Fuenlabrada 72-65 Asefa Estudiantes

Los Fuenlabrada-Estudiantes son partidos cada año de más rivalidad. El ‘pique’ entre ambos equipos y aficiones va in crescendo y la atmósfera que se respira en cada choque es de partido grande, emocionante y de los que gusta disfrutar.

Y ese ambiente se trasladó una vez más a la pista. Fue un partido duro, de dominio alterno y que no se decidió hasta el último minuto. Comenzó mandando Fuenlabrada, con cinco puntos de inicio de Kristaps Valters y un Batista muy enchufado que aprovechó las bajas del Estudiantes en el juego interior para dominar la zona a su antojo. Fuenlabrada conseguía las primeras ventajas, superiores a seis puntos, pero Estudiantes las redujo rápidamente en hasta tres ocasiones por medio de Clark, Ellis y Germán Gabriel.

Al término del primer cuarto, Fuenlabrada mandaba por seis (24-18), pero en el segundo cuarto cambiaron las tornas y Estudiantes tomó el mando del partido. Los de Maldonado, lastrados por la lesión de Laviña y los problemas de faltas de Valters y Rabaseda, tuvieron muchos problemas para frenar a Albert Oliver que guió a los del Ramiro hasta llegar a ponerse por delante (34-35, min.19). Batista, picado con los numerosos ‘dementes’ desplazados hasta el Fernando Martín, se encargó de revertir la situación y devolver la superioridad en el marcador al Fuenlabrada justo antes de llegar al descanso. 37-35.

El partido hasta el momento estaba dominado por las imprecisiones, las pérdidas, y los numerosos triples en posiciones claras fallados por ambos equipos. Las diferencias, cuando surgieron, nacieron desde el juego interior y no al revés, como ambos entrenadores habían comentado en la previa del partido. Batista y Jasen, aprovechando la superioridad en los emparejamientos con Rabaseda y Cortaberría, hacían estragos en ambos tableros.

Tras la reanudación, Fuenlabrada salió muy enchufado, con Cortaberría convirtiéndose en referencia exterior y Rabaseda extra-motivado. El catalán realizó dos mates consecutivos que levantaron al público de sus asientos y pusieron la máxima diferencia del partido en el marcador (51-40, min. 24). Sin embargo, Estudiantes se enchufó en ese momento al partido, comenzó a anotar de fuera y a correr en las transiciones y consiguió taponar la fuga de principios de cuarto. Al final del tercer acto se llegaba con 57-52 en el marcador, todo por decidir, y lo más importante: Rabaseda y Valters con 4 faltas.

Alentados por los suyos, que ganaron el duelo en las gradas, los estudiantiles comenzaron el último periodo pletóricos, dirigidos por un Albert Oliver soberbio que igualó el partido a 63 con un 2+1 y un triple posterior a sólo 4 minutos del final. Entonces apareció el invitado sorpresa de Fuenlabrada, un hasta entonces horrible Kus que sacó a relucir la mano que se le presume y tumbó a los de Casimiro con dos triples y tres tiros libres que pusieron la sentencia al partido. Al final, 72-65 y el Fuenlabrada que sigue mantiendo muy vivas sus opciones para entrar en la Copa del Rey.

72- Baloncesto Fuenlabrada: Valters (9), Laviña (-), Cortaberría (12), Ayón (2), Batista (10) - Mainoldi (8), Kus (9), Colom (9), Guardia (-), Rabaseda (13).

65- Asefa Estudiantes: Granger (6), Ellis (6), Welsch (5), Clark (10), Asselin (2) - Oliver (11), Gabriel (7), Jasen (16), S.Sánchez (2).

viernes, 24 de diciembre de 2010

Decisiones equivocadas

Decía ayer Otis Smith, general manager de los Orlando Magic, hablando sobre el recientemente traspasado desde los Wizards Gilbert Arenas que "a veces las buenas personas toman malas decisiones". Con esta frase quiso definir lo que habían sido los últimos años en la liga del bueno de Gilbert y ciertamente no lo pudo hacer mejor.

Es una constante en el mundo del deporte que las decisiones se tomen en base a impulsos y no a razones. Quizás en un momento se nos pase por la cabeza que ponerle una pistola en la cabeza a un compañero es una sensacional idea, pero el cerebro nos dice luego que no, y las sanciones de Mr.Stern nos lo confirman. ¿Solución? No hacerlo más, en teoría.

Pero como han dicho un par o tres de sabios a lo largo del tiempo, el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra, o tres, o cuatro, o cinco. En este caso el Real Madrid C.F sería el hombre por definición, el que tropieza con la misma piedra una y otra vez pese a que se la anuncien desde kilómetros de distancia, aunque la fortifiquen. Hará todo lo que esté en su mano por pisarla y tropezar de nuevo y todo por los malditos impulsos.

Un impulso sacó a Arjen Robben del equipo a última hora, sin tiempo para recambios. Otro hizo lo mismo con Wesley Sneijder, con algo más de tiempo. Lo mismo pasó con Rafael Van der Vaart. Otras veces el 'neurótico' fue el jugador, y no el club, vease el caso Robinho, pero parece claro que la historia reciente del Real Madrid en cuanto a enajenaciones mentales transitorias está densamente poblada. Pero no aprendemos.


El objeto de los impulsos en esta ocasión es Karim Benzema. 23 años recién cumplidos, segunda temporada en el Real Madrid y numerosas las voces deseosas de empaquetarlo al mejor postor. Yo que soy muy de refranes aplico eso de que "cuando el río suena, agua lleva" y que cuando los que están esperando como perros de presa a que pongas en venta a un jugador son Manchester United, Chelsea y equipos de ese calado, se te tiene que poner la mosca detrás de la oreja. Cuando con cada vez más asiduidad el jugador demuestra de lo que es capaz, directamente se te tiene que meter hasta el tímpano.

No seré yo quien defienda a Benzema como sucesor de nada ni como la superestrella mundial que a día de hoy (veremos en un futuro) no es. He sido el primero en criticar al francés cuando no ha estado a la altura, que han sido unas cuantas veces, pero siempre he defendido también que la calidad la tiene y los recursos para jugar en el Real Madrid le sobran. Venderlo sería caer en el mismo error de siempre, venderlo en Invierno sería el error de siempre multiplicado por mil. Estamos hartos de guiarnos por impulsos y comprobar a posteriori que 'la hemos cagado', probemos por una vez algo distinto. Dejemos de tropezar con la misma piedra. Somos buenas personas, dejemos de tomar decisiones equivocadas.

Confeti para todos, feliz navidad.

lunes, 20 de diciembre de 2010

domingo, 19 de diciembre de 2010

Baloncesto Fuenlabrada 81-76 Bizkaia Bilbao Basket

El Fuenla no afloja en casa

Bizkaia Bilbao Basket y Baloncesto Fuenlabrada llegaban a la duodécima jornada de la Liga ACB con idéntico record: 6-5, pese al titubeante inicio de temporada de los vascos y el fuerte arranque de los madrileños. Partido decisivo para los locales, que venían de encajar dos derrotas consecutivas fuera de casa ante Power Electronics Valencia y Assignia Manresa y buscaban en el día de hoy una victoria que les acercase un poco más el ambicioso objetivo de la Copa del Rey.

El partido comenzó vibrante, con Esteban Batista aprovechando su superioridad en el poste bajo y cargando de faltas a los pivots bilbainos, especialmente un Axel Hervelle que tuvo que irse rápidamente al banquillo tras cometer su segunda falta personal. El primer atisbo de escapada fuenlabreña (9-4) fue cortado por una rápida reacción visitante por medio de un triple de Alex Mumbrú y una técnica a Valters que volvió a llevar la igualdad al marcador. La anotación fue la tónica dominante durante el primer cuarto, un intercambio de golpes por momentos anárquico, con defensas algo blandas y bastante precipitación. Finalmente, un triple del recién ingresado Leo Mainoldi, puso el 24-20 que lucía en el marcador al término del primer acto.

En el segundo, las defensas se ajustaron algo y el nerviosismo siguió in crescendo. Fuenlabrada estuvo más acertado en esos momentos y consiguió la primera gran diferencia del partido de la mano de Batista y Valters (37-24, min.15). Bilbao reaccionó poniendo en pista a Axel Hervelle y Alex Mumbrú, hasta el momento en el banquillo por faltas. Era el momento de Batista, crecido por su particular pique con el belga Hervelle y extra-motivado tanto en ataque como en defensa. No obstante, Bilbao no entregaba la cuchara y comandado por Josh Fisher se mantenía en el partido a base de triples que le mantenían siempre en torno a la barrera de los diez puntos de desventaja con los que terminó la primera mitad del encuentro. 45-35 para los locales, comandados por un Esteban Batista que al descanso acumulaba 16 puntos y un total de 25 de valoración.

En el tercer cuarto, Bilbao salió dispuesto a explotar la carencia de aleros altos del Fuenlabrada y cargó el juego sobre Alex Mumbrú, que hizo daño en esos primeros minutos de la segunda mitad. Blums también se unía al intento de remontada visitante, que era cortado por un acertado Salva Guardia desde el triple. Pese a ello, los de Katsikaris no cejaron en el empeño y basándose en una fortísima defensa y una transición muy rápida consiguieron ajustar el marcador y poner el partido al rojo vivo. Como en el primer cuarto, sería Mainoldi el encargado de cerrar el periodo con un triple y dar algo más de aire a los de Maldonado. Tras tres cuartos, el marcador reflejaba un 61-56 a favor de los locales que dejaba absolutamente todo por decidir.

La igualdad del marcador se transformaba en nervios sobre la cancha. Ninguno de los dos equipos era capaz de acertar de cara al aro y la anotación por minutos brillaba por su ausencia. El protagonismo en este momento era para los árbitros, a los cuales el público y los jugadores fuenlabreños reclamaban algunas antideportivas que los colegiados no interpretaron como tales.

Apareció entonces Xavi Rabaseda, hasta el momento desaparecido, con 7 puntos consecutivos que devolvieron la confianza al equipo y reestablecieron los 8 de diferencia en el electrónico a 5 minutos del final. Reaccionó Bilbao que volvió a acercarse en el marcador, pero la racha de Rabaseda no se iba a quedar ahí y el catalán volvió a acertar desde el 6.75 para poner a 1:30 del final un 76-69 que dejaba las cosas muy complicadas para los visitantes. Por enésima vez en el partido, los bilbainos volvieron a reaccionar pero, por tercera vez en el encuentro, Mainoldi se encargó de ajustar la muñeca desde la esquina para poner un 79-72 que sentenciaba el encuentro definitivamente. Tras ello, intercambio de tiros libres para maquillar y una última jugada de Bilbao que puso el definitivo 81-76 en el marcador y certificó la séptima victoria de los locales en lo que va de temporada. La Copa, más cerca.

81- Baloncesto Fuenlabrada: Valters (10), Laviña (7), Cortaberría (6), Ayón (4), Batista (18) - Mainoldi (9), Kus (6), Colom (5), Guardia (6), Rabaseda (10)

76- Bizkaia Bilbao Basket: Fisher (11), Blums (14), Mumbrú (11), Hervelle (3), Mavroeidis (3) - Warren (2), Jackson (14), Banic (18), Hdez.Sonseca (0), Vasileiadis (0)

lunes, 13 de diciembre de 2010

Economía imaginativa

El Director de Deportes del Gobierno Vasco, Patxi Mutiloa, tiene un auténtico máster en eso que algunos dan en llamar últimamente "economía imaginativa". Que en política más o menos viene a ser cobrar hasta por dar un paso.

La genial idea que se la ha ocurrido a este caballero es cobrar por ver ciclismo a pie de carretera. El señor Mutiloa esgrime como principal argumento que "el ciclismo, desgraciadamente, es un deporte que cuesta mucho y en el que el espectador que está a pie de carretera no aporta económicamente". Bien, es discutible, pero es una creencia que bien puede ser compartida por la mayoría. En mi opinión, el espectador que está a pie de carretera es el que da la imagen a la competición, el que genera prestigio, "distinción" y lo que ello significa posteriormente en sponsors y patrocinadores. Quizá de forma directa el espectador no aporte, pero indirectamente su presencia es absolutamente clave.

Se pregunta Patxi Mutiloa que "hasta cuando será sostenible este sistema". Pues si todo sigue como de costumbre, es y seguirá siendo exactamente igual de sostenible que en los últimos 100 años en los que a nadie se le ha ocurrido cobrar a la gente por ver pasar unas bicis por una carretera durante diez segundos. Con su propuesta, el político compara el consumo en directo de un deporte como el ciclismo con otros como fútbol, baloncesto o pelota vasca cuando, evidentemente, no hay ni un solo punto de acuerdo entre ellos. En fútbol, el espectador paga por 90 minutos en los que ve todo lo que ocurre sobre un determinado espacio de juego. ¿Quién pagaría por ver pasar al pelotón en menos de medio minuto? Quizás en las etapas reinas sí, la cosa siguiera teniendo su sentido, pero ¿y en el resto? ¿seguimos alimentando el sinsentido de que el ciclismo se reduce al Angliru y La Bola del Mundo? Así nos lucirá el pelo si estos tienen que ser los salvadores del ciclismo.

Se olvida también el señor Mutiloa de uno de los grandes encantos de las carreras ciclistas: los pueblos engalanados para recibir al pelotón, la ilusión de la gente por que la Vuelta, el Tour, el Giro...pasen por la puerta de su casa. ¿Cobrará el Gobierno Vasco a las personas que salgan a la puerta de su casa a ver pasar al pelotón? ¿Y a los que se asomen al balcón, tarifa reducida?

Dejen, políticos, de meterse donde no les ha llamado nadie y tengan un poco de respeto tanto a la gente como a ustedes mismos, que esto último parece que se pierde cada vez más, por desgracia.

Confeti para el Tour de Francia.

viernes, 10 de diciembre de 2010

F1 2010, en resumen (y II)

4: ERRORES: A la orden del día

¿Recuerdan aquellas temporadas de Schumacher o Alonso, en las que subían día sí día también al podio? Parece harto improbable eso ahora. Ningún puntero ha sumado más de 10 podios, poco más del 50%: la regularidad tan deseada en un torneo por puntos ha brillado por su ausencia. Y es que la palabra clave de la temporada ha sido "error". Podríamos empezar a nombrar fallos de cada piloto y no acabaríamos hasta mañana, pero desde luego cada uno ha tenido como mínimo un error sonado.

El accidente de Vettel en Turquía y el choque en Bélgica fueron dos fallos mayúsculos, que le costaron muchos puntos a Seb, por no hablar de reputación. Por su parte, Fernando tuvo un antes y un después con su choque en Mónaco, impidéndole calificar, junto con sus desastrosas salidas en Australia y China; mientras que Mark Webber fue el más errático, con sus dos choques con Lewis Hamilton y el accidente decisivo en Corea, donde perdió el liderato (por no hablar de sus continuas salidas regularcillas). Asimismo, Lewis Hamilton tenía una temporada impoluta hasta que decidió autoinmolarse en la Variante della Roggia en Monza, chocando con Massa y rompiendo la dirección. Button, como acostumbra, apenas cometió errores graves en carrera, pero sí que tuvo un desempeño bastante lamentable en ciertas calificaciones como Gran Bretaña, Hungría o Brasil. Al final, aquello de que "ganará el que menos falle" fue totalmente falso, aunque desde luego Vettel no fue el más errático de todos, a pesar de lo que se diga. ¿O alguien es capaz de enumerar más fallos que los nombrados?


5: NORMATIVA: "Las carreras serán aburridas", ya...

Al igual que muchos se alzaron en contra del Madrid tras su empate en Mallorca en la 1ª jornada de Liga, fueron numerosos los que vaticinaron una temporada 2010 de F1 aciaga en cuanto a espectáculo. Y todo porque Bahréin fue un GP malillo. Por suerte, la gran carrera de Australia nos dio un avance de lo que iba a ser esta campaña, con momentos estelares en casi todas las carreras. Las normas introducidas en 2009 para mejorar adelantamientos han sido algo útiles y ahora se ven más maniobras de este tipo.

Mientras Lewis parecía abrirse paso sin problemas en muchas carreras, Kobayashi daba lecciones de adelantamiento, con unas maniobras espeluznantes en la horquilla de 130R y un adelantamiento soberbio en la última curva de la última vuelta a Buemi en Valencia. Por no hablar de otras maniobras espectaculares (sin ser sobrepasos), como el duelo en Singapur entre Alonso y Vettel, o las paradas en boxes más rápidas en mucho tiempo, debido a la norma de no repostar. Una norma que claramente ha disminuido la importancia de los boxes y ha aumentado la de la pista. Como queremos los aficionados.


6: ESTRATEGIA: El arte de arañar puntos

Da igual el puesto en el que califiques: la carrera nunca está perdida. Que se lo digan a Button, que tuvo 3 clasificaciones espantosas y sin embargo consiguió remontar en las 3 ocasiones hasta puestos notables (4º, 8º, 5º). O a Webber, que en Singapur estaba en una penosa 5ª posición y sin embargo un paso por boxes (y unos audaces adelantamientos, todo sea dicho) le dieron un bien merecido podio. Pero desde Abu Dhabi hablar de estrategia conlleva a hablar de "desastre Ferrari". Y es que el fiasco que vivimos en el circuito asiático es difícil de olvidar. Ferrari no entendió que, con Vettel 1º, Webber nunca podría ganar el título. Y teniendo en cuenta que Webber no iba a pasar a los McLaren viendo su ritmo pésimo, marcarle fue un error infantil debido al tráfico que había delante. Personalmente, y en cuestión de segundos, yo también habría picado, porque si Webber hubiera pasado a Fernando en boxes, Alonso sería virtual 5º, lo que daba el título a Sebastian. Pero creo que sus predicciones más pesimistas no indicaban que el F10 fuera incapaz de adelantar al R30 de Petrov.

No obstante, no todo fue un desastre en Ferrari en 2010: llamar a Fernando a boxes en la primera vuelta de Mónaco le dio unos valiosos puntos, y las victorias en Italia y Singapur fueron, aparte de algo de demérito de la escudería rival, un buen trabajo de la Scuderia, por no hablar del adelantamiento en boxes a Hamilton en Canadá. Por otra parte, Red Bull protagonizó la parada más rápida de la temporada cuando pararon a Vettel en la última vuelta del Gran Premio de Italia para calzar los neumáticos duros. Apenas 2,9 segundos bastaron para cambiar las 4 ruedas del RB6. Con la normativa de no repostar y unos neumáticos más duros de lo recomendable en muchos GGPP, la estrategia ha sido mucho menos determinante este año, pero desde luego ha dado sus puntos, y teniendo en cuenta que el Mundial se ha decidido por cuatro está claro que las cosas habrían sido distintas en otras circunstancias.

jueves, 9 de diciembre de 2010

F1 2010, en resumen (I)

Hace ya casi un mes que la bandera de cuadros cayó en Abu Dhabi, coronando campeón a Sebastian Vettel. Con todo ya calmado, va siendo hora de comentar lo que ha sido esta espectacular temporada. Entre hoy y mañana, publicaré mi opinión sobre los que considero los 6 puntos clave de este 2010, los cuales han conformado este año lleno de pasión, polémica y mucha, mucha competición:


1: MECÁNICA: Un buen coche hace un buen piloto

Una de las cantinelas que más repiten los pilotos que no acaban siendo ganadores es que "el rival tenía mejor coche". Siempre ha habido mecánicas superiores e inferiores, así que echarle la culpa a la mecánica inferior es tan vulgar como cierto. En 2009, vimos a Brawn produciendo un coche sublime, el BGP 001. En las 7 primeras carreras, Brawn sumó 6 victorias (3 con doblete), 4 poles y 96 puntos de 117 . En 2005 y 2006, Alonso consiguió muchas victorias en la 1ª mitad de cada año gracias a dos grandes Renault.

Así que este año no iba a ser menos: Adrian Newey creó una máquina ultrarrápida llamada RB6. Y sus pilotos, dos conductores "por probar": Sebastian Vettel, rápido pero inexperto y cuya carrera se había reducido al equipo Red Bull (o su hermano Toro Rosso); Mark Webber, veterano cuya primera victoria le llegó con casi 33 años en su 8ª temporada. Conforme avanzó el año, se vio que, efectivamente, en F1 el coche es un 80% del éxito: si Vettel y Webber podían haber sido calificados hace 2 años como de "pilotos que no ganarán un título en 2010" (uno por excesivamente joven y otro por no dar la talla), ahora que pilotan ese coche parecen Fangio y Schumacher. El RB6 fue durante al menos 16 carreras (excluimos Canadá, Alemania e Italia) un coche con el que ganar la carrera sería relativamente sencillo, y en algunos GGPP la superioridad fue insultante, como España, Gran Bretaña o Hungría. Con ese bólido, parecía que el campeonato de pilotos tendría como única emoción la lucha interna. Cuán equivocados estábamos.


2: FIABILIDAD: Cuando ser rápido no basta

Muchos aficionados españoles descubrimos la importancia de la fiabilidad en 2005, cuando Kimi Räikkönen, el rival de Alonso por el título, tuvo problemas mecánicos en 5 de las últimas 10 carreras, por no hablar del palier en San Marino y el pinchazo de Malasia. El MP4-20 era el bólido más rápido desde mayo, y sin embargo la diferencia que Alonso acumuló en las primeras pruebas extraeuropeas parecía inamovible, e incluso crecía. Aunque Fernando igualmente pudo haber ganado dicho título con un McLaren sano, hay que reconocer que ese hecho ayudó y mucho.

Así, en 2010, con la tecnología punta y una fiabilidad (supuestamente) a prueba de bombas, nos sorprendió a todos la facilidad con la que el RB6 tenía tantos problemas. Como si de un acto de justicia se tratara, el Red Bull era tan poco fiable como insultantemente rápido. Vettel mereció ganar las carreras de Bahrein, Australia y Corea, pero el motor en 2 ocasiones y los frenos en Melbourne no se lo permitieron. Además, cedió puntos con Alonso en España, donde los frenos volvieron a fallar. La dosis de Mark se redujo a una sustitución de caja de cambios en Canadá y un motor sobrecalentado en Alemania, hechos dolorosos no obstante. Todos estos problemas (de los cuales se le suele echar la culpa a Adrian Newey, por "ceñir" el monoplaza en pos de un mejor rendimiento aerodinámico) permitieron que Alonso, Hamilton y Button, con mecánicas claramente inferiores, subieran al podio y ganaran carreras hasta tal punto de complicarle el título a Red Bull.


3: POLÍTICA INTERNA: ¿Les suenan las órdenes de equipo?

La relación entre compañeros de equipo ha sido más voluble incluso que los propios avances mecánicos o en materia de seguridad a lo largo de la historia de la F1. Quizá voy demasiado lejos con esa afirmación, pero hace más de 50 años, Juan Manuel Fangio ganó un título mundial cuando Peter Collins abandonó en la última carrera para dejar su coche al "Chueco", a pesar de que el propio Peter tenía aún opciones en dicho campeonato. Un gesto tremendamente admirable. Ya no se pueden intercambiar coches, pero... ¿se imaginan de verdad a Vettel cediendo su coche a Webber para que éste se proclame campeón? Sería lo último.

Las luchas entre compañeros de equipo han sido el pan nuestro de cada carrera. El absurdo choque entre Vettel y Webber en Turquía fue el detonante: uno pensó que el otro iba a ceder caballerosamente su posición, el otro no opinó igual y chocaron, para irritación de Horner, Newey y demás en el muro de Red Bull. Unos minutos después, Button y Hamilton jugaban a pasarse y repasarse. Nos consta que Martin Whitmarsh todavía no se ha recuperado del shock.

Y luego vino el lío del alerón: a Vettel se le rompe su nueva unidad por culpa ajena, y al existir sólo el alerón de Webber como único alerón nuevo Red Bull decide quitárselo y dárselo a Seb, que iba por delante en el Mundial. Justo o no, el caso es que Lewis pinchó la rueda trasera de Vettel y Webber ganó, y entonces soltó en la radio un "no está mal para ser el segundo piloto". Horner no sabía dónde meterse: cuando la igualdad de material era imposible de asegurar (salvo que decidieran pasar al alerón viejo y perder así rendimiento), darle el material bueno al líder fue lo criticado, cuando en otras ocasiones y otros equipos ha sido un único piloto el que recibía las evoluciones.

Y justo dos semanas después, el escándalo Ferrari. Massa deja pasar a Alonso tras unos inquietantes mensajes por radio ("Fernando... es más rápido... que... tú... ¿puedes confirmar que has entendido el mensaje?"). Felipe aparece tremendamente serio en el podio y en la rueda de prensa, y toda la Scuderia inicia su modo defensivo y sus consabidas declaraciones: "trabajamos en equipo", "he hecho lo mejor para el equipo", blablabla. Era evidente que Ferrari había ordenado dejar pasar a Alonso, pero una vaguedad de la norma y, todo sea dicho, una decisión cuanto menos discutible del Consejo Mundial del Motor hicieron que Ferrari saliera con una simbólica multa (10 veces menor que cuando en 2002 hicieron lo mismo, sin estar prohibido en aquel entonces). A partir de ahí, reproches, comentarios subidos de tono y periodistas pesados: mientras la prensa inglesa atacaba a Fernando Alonso (recuerden que en las islas es considerado un "traidor" por el escándalo de espionaje de 2007), medio mundo daba por hecho que Vettel estaba en un pedestal en RB mientras que Webber era menos que el barrendero. La cordura imperó y la F1 reconoce que el modelo Red Bull de igualdad máxima hasta la última carrera ha sido el más justo y, en definitiva, el más exitoso.


Y mañana, más: ¿Cómo se han podido cometer errores tan sonados? ¿Cuánto han influido las nuevas normas? ¿Quiénes han sido los mejores estrategas?

miércoles, 8 de diciembre de 2010

Guardiola contra el mundo

El hombre lleva durante varias décadas considerando políticamente correcto lo que comúnmente se llama "objetividad", una utopía siempre que involucre a un ser pensante. Por suerte, nunca seremos del todo objetivos; siempre habrá discrepancias y opiniones. Pero a ciertos estamentos de la sociedad se le exige un mínimo de veracidad, ya que son responsables de la opinión pública: los medios de comunicación, cuyo deber es informar y sin embargo se han convertido en meros artilugios con los que enriquecerse. Particularizando, es obvio que me refiero a la prensa deportiva, esa que ha pasado de abarcar todos los deportes con los mejores reporteros a convertirse en publicaciones panfletarias defendiendo hasta la extenuación a uno u otro bando, cual Guerra Civil.


Un servidor cree que se ha llegado al extremo del patetismo en esta prensa cuando cada semana descubre que no se ha llegado al límite. Y este fin de semana hemos encontrado un nuevo ejemplo: hablo, cómo no, del lío descomunal en el que se vio envuelto el Barcelona para jugar en el campo de Osasuna el pasado sábado. Los hechos son evidentes: la huelga encubierta de controladores aéreos (un tema tan trillado que no merece ser expuesto de nuevo) provoca un caos total en España. Algunos equipos, como Sporting o Atlético, idean planes alternativos, pero el Barcelona de Guardiola, acostumbrado a viajar en el día de partido, despertó el sábado por la mañana sin saber muy bien cómo se iban a desplazar. Aena les aseguró que el avión saldría sin problemas, pero la RFEF comunicó al Barça que el partido se aplazaría al día siguiente si no podían llegar. Así, cuando se comprobó que el avión no salía, Pep ideó un plan alternativo para viajar, aunque eso conllevara desplazarse un día antes del partido y menos descanso para preparar el partido de Champions. La Federación, ante la negativa de Osasuna (con quien no consultó el aplazamiento), da marcha atrás y dice al Barça que el partido se juega el sábado a las 20.00, como estaba previsto. Por tanto, el club tuvo que viajar a toda prisa y llegó con retraso a Pamplona.

Hasta donde sabemos, ésa fue la historia. Sin embargo, diario Marca
decidió usar el siguiente titular: "Un capricho de Guardiola casi hace perder al Barça los puntos", junto con páginas interiores repletas de acusaciones hacia Pep, acusándole de "reírse de toda España". Mientras tanto, el mismo periódico recogía declaraciones de gente de la Federación, en la que claramente decían que la iniciativa de retrasar el partido fue de ellos. Señores de Marca, ¿por qué demonizar a Guardiola? ¿Qué tipo de periodismo es insultar y menospreciar a un gran entrenador que no es culpable de lo que se le acusa? Y sobre todo, ¿se creen que la gente es boba? ¿Qué es eso de publicar en portada que todo es culpa de Guardiola y luego en páginas interiores publicar las declaraciones de la Federación que dicen lo contrario? Con su persecución a Pep, Marca demuestra que lo único que le interesa es crear polémica barata de la cual alimentarse, gracias a los compradores del diario y a los usuarios de sus servicios web o móvil. Por desgracia, ése es el único objetivo: vender, a toda costa. Un periódico de orientación madridista que en su día fue la cumbre del periodismo ahora se ve reducido a un vergonzoso ataque constante a los estamentos del Barcelona, llámense Laporta, Guardiola...

No es que defienda a Guardiola por ningún motivo en especial, y de hecho sus declaraciones posteriores sobre que Catalunya es un país que pinta poco fueron bastante desafortunadas. Simplemente justifico lo que ha sido un lamentable acoso y derribo por parte de ciertos medios de comunicación, insultando a un entrenador que no pintaba nada en la historia que la Federación se encargó de liar. Hace tiempo que el "todo vale" sirve para Marca, pero ya cansan. Y si quieren de verdad ser un panfleto que apoya al Madrid sin rigor alguno séanlo, pero no se consideren nunca más periodismo deportivo. Por favor.

PD: Sé perfectamente que ni he descubierto América ni Marca es el único diario que lo hace. Al menos Sport y Mundo Deportivo confiesan ser periódicos para la gente del Barça.

viernes, 3 de diciembre de 2010

Cuando nos quitamos las caretas

Las personas por lo general tratan de guardar las apariencias. Los que no lo hacen son considerados en cierto grado rebeldes y hasta ellos no pueden evitar caer en ese instinto tan humano. Sin embargo, hay una nueva estirpe, de no-hombres, no-muertos, infectados o vaya usted a saber qué que desafían esa norma. No sé como los llamaría Max Brooks, pero sé como los llamo yo: sinvergüenzas.

Esta tarde, en Zürich, en la elección de la sede para los mundiales de fútbol de 2018 y 2022, la palabra mamoneo ha alcanzado niveles de representación hasta ahora desconocidos. Primero habría que cuestionarse la lógica que tiene designar en 2010 la sede de 2022, con doce, ¡doce! años de por medio, pero vamos a ir al grano.

Rusia partía como clara favorita para albergar el Mundial 2018, por delante de la candidatura inglesa, ibérica y la de belgas y holandeses. Se pueden discutir sus infraestructuras ya construidas, la distancia entre sedes, las comunicaciones...no es una candidatura perfecta ni mucho menos, pero responde a los criterios que últimamente está siguiendo la FIFA y desde luego es una nación más preparada para un evento de este tipo que Sudáfrica, sin ir más lejos.

Claro que esos patrones dejan de ser patrones y se convierten en chistes cuando apenas unos minutos después se anuncia que el Mundial de 2022 se disputará en...Qatar.

Qatar es el segundo país más pequeño del golfo tras Bahrein y cuenta con una población total de 885.000 habitantes, o lo que es lo mismo, toda la población de Qatar entraría en once estadios de la capacidad del Santiago Bernabéu. Su selección de fútbol nunca ha participado en una Copa del Mundo y actualmente se encuentra en el puesto número 113 del ranking FIFA, por detrás de la República Centroafricana y por delante de Thailandia. Un vuelo Madrid-Doha cuesta aproximadamente 650 euros.

Son datos fríos, libres de interpretación, que eso viene ahora. La FIFA ha pervertido todos los valores que proclama y ha tomado la decisión que más daño puede hacer a un deporte: alejarlo de la afición. En Sudáfrica hemos visto estadios llenos a última hora debido al regalo de entradas a la población local, escasísimos viajes por parte de la mayoría de aficiones y estadios con ambientes de todo menos futboleros. En Qatar ni siquiera hay población a la que regalar esas entradas.

¿Cómo puede hablar la FIFA de diversificación cuando no hay nadie a quien beneficiar? ¿De verdad la FIFA piensa que alguien se va a creer que se toma la decisión pensando en esos 885.000 qataries? Pues no, obviamente la FIFA no piensa que nadie lo vaya a creer, pero le da lo mismo.

Si no le diera lo mismo, la organización del Mundial habría recaído por ejemplo en Australia, pero como ya hemos dicho al principio, a los señores de la FIFA esto de las apariencias les importa un bledo.

Qatar promete tecnología, marcianadas en lo referente a los estadios y mucha modernidad, seguro, pero fútbol en esencia muy, muy poco. Por no hablar de que se le regalará la plaza a una selección de nivel, a día de hoy, mediocre. Allá la FIFA con el rumbo que quiere adoptar, con su fair-play de pandereta y sus principios subastados al mejor postor o al que primero puje. En 2022 será Qatar, en 2026 bien podrá ser Kuwait y en 2030 por qué no Chad, todo sea por la diversificación y por la pasta. Siempre por la pasta.

Confeti para los petrodólares.