Tras tres meses de competición, llega la hora de valorar a cada uno en su justa medida. Muchos hablan, y es cierto, de 'liga escocesa' en la Liga BBVA. Dos equipos por encima del resto y los demás a años luz, y a los datos me remito. En Champions, el Real Madrid se ha enfrentado con históricos venidos a menos y el Barcelona con actores invitados de la competición.
Es el partido del Lunes (sí, Lunes) el primero grande del año y para algunos el partido decisivo del año. Por el factor moral, por el momento en el que llega...quizá pueda serlo, pero esto es muy largo y a estas alturas de la competición todavía manda el 'arrieritos somos'. De lo que no cabe duda es de que nos encontramos ante un auténtico partidazo, al menos a priori.
Se enfrentan los hasta ahora dos mejores equipos de Europa, con los jugadores más en forma del momento en sus filas y con los dos entrenadores de moda de los últimos años al mando de las naves madridista y culé. Jose Mourinho se perfila, o mejor dicho auto-perfila como uno de los grandes protagonistas del encuentro. El portugués tiene muy buenos recuerdos del Camp Nou y tratará por todos los medios de reescribir la historia que escribió en las pasadas semifinales de Champions League.
Pero lo que importa el Lunes es el fútbol, y teatros aparte, será el único arma con el que cuenten ambos equipos. El Barcelona, que últimamente ve amenazada su supremacía, quiere despejar las dudas y dejar claro quien sigue mandando. El Madrid por su parte intentará demostrar que el cetro ha cambiado de manos. ¿Lo ha hecho?
El Barcelona sigue proponiendo el mismo juego que lleva ofreciendo dos años, no obstante de manera menos eficiente. La baja de Samuel Eto'o ya repercutió negativamente la temporada pasada en el cuadro blaugrana y este año con David Villa tampoco se han terminado de cubrir todas las prestaciones que ofrecía el camerunés. El Barcelona sigue siendo armónico en el toque pero algo menos eléctrico en la definición, le cuesta culminar las jugadas pero cuando lo consigue lo hace con suma brillantez. En este apartado el conjunto de Pep Guardiola nota en exceso el bajo nivel de forma de Andrés Iniesta, preocupante.
El equipo de Jose Mourinho propone todo lo contrario. El toque existe pero es sospechoso de asesinato y se trata de eliminar tan pronto como es posible. Cinco pases mejor que veinte y uno mejor que cinco es la máxima de este Real Madrid. En conducción el Real Madrid puede crear problemas a una defensa culé poco acostumbrada a jugadores de este tipo. Aparte de Cristiano Ronaldo, Di María será pieza imprescindible para Mourinho en el clásico. Esta verticalidad tiene un punto débil y al Real Madrid le suelen sorprender a la contra, más un equipo de calidad infinita como el FC Barcelona. No obstante, las transiciones defensivas son mejores cada día y la pareja Khedira-Xabi Alonso va encontrando su punto óptimo de rendimiento.
Ambos equipos llegan en un momento sensacional, el mejor de la temporada y el partido tiene todos los ingredientes para ser histórico. Al Barcelona solo le vale ganar, mientras que para el Real Madrid un empate es un resultado más que aceptable jugando fuera.
Mi pronóstico particular: 1-1. Descarto un partido de muchos goles, ¿cuál es el vuestro?
Confeti para el fútbol.
Desde mi punto de vista, creo que el partido caerá del lado del Barça. Quizá es porque es lo que preferiría, pero me parece que el Barcelona ante los grandes juega mucho mejor que contra los pequeños, sobre todo en el Camp Nou (véanse Hércules, Mallorca, Valencia y Sevilla como ejemplos), y no sé si Mourinho sabrá parar el particular estilo del Barça. Mantener el sistema que los madridistas ya se saben de memoria, sin apuntalar el centro del campo, evitaría un marcaje especial a los Xavi, Iniesta y cía que tanto peligro crean en la zona ancha, pero modificar el esquema podría traer problemas de entendimiento. Dice la sabiduría popular que "si no está roto, no lo arregles", así que apuesto por un Madrid similar a lo que hemos visto durante toda la temporada, aunque a sabiendas de que la iniciativa, por primera vez en mucho tiempo, no será suya.
ResponderEliminarMi apuesta: 3-0.