El Real Madrid ganó esta noche en Anoeta un partido duro, intenso y por momentos loco.Empezó bien el Madrid, con ocasiones para Di María, Higuaín y un Cristiano Ronaldo algo más asociativo que de costumbre, pero el dominio duró 15 minutos. A partir de ese momento la Real Sociedad se hizo dueña del balón, que no duraba nada en poder de los madridistas, y asedió la portería de Casillas de la mano de Xabi Prieto que fue un auténtico quebradero de cabeza para un atareado Marcelo.
No funcionó con la precisión con la que lo hizo ante el Ajax el doble pivote formado por Xabi Alonso y Khedira y lo notó mucho la elaboración del cuadro blanco. Ninguno de los dos consiguieron enlazar rápido con los tres de arriba y la salida de balón resultaba lenta y pesada. Esto lo notó y mucho Özil, desaparecido durante mucho tiempo e intermitente en sus acciones, que no recibía balones en posiciones en las que pudiera hacer daño, gracias al grandísimo trabajo defensivo de la Real Sociedad que supo dominar con autoridad la zona de tres cuartos en defensa.
El Madrid terminó la primera parte pidiendo la hora y superado por la fiereza de los vascos que a punto estuvieron de adelantarse antes del descanso.
Tras la reanudación, volvió a dominar el Real Madrid. Fueron los mejores minutos de Khedira y Özil, aunque el gol llegó de las botas de Ángel Di María en una auténtica genialidad. Desde la esquina del área y con su pierna mala, puso un balón a la escuadra inalcanzable para Bravo y que se convierte en uno de los goles de la Liga. Parece que el argentino poco a poco se va enchufando y esto es una noticia expléndida para el Real Madrid.
Después del gol el conjunto blanco puso de manifiesto una de las virtudes que se le vieron ante el Ajax y que refrendó hoy. No se conformó y buscó el segundo, contradiciendo a los que prejuzgaron a Mourinho con la etiqueta de amarrategui y conservador. Sin embargo, cosas del futbol, a los 10 minutos llegó otro gol pero en este caso fue para la Real Sociedad, cuando peor lo pasaban los locales. Una falta lateral lamentablemente defendida por Carvalho que permite rematar sólo y en boca de gol a Tamudo que ponía el 1-1.
No se deshizo el Madrid, que dió muestra de una buena y muy útil capacidad de sufrimiento, y siguió buscando la victoria en una jornada marcada en rojo para aumentar distancias con el FC Barcelona. Hubo ocasiones pero finalmente el gol llegó de rebote en una falta lanzada por Cristiano Ronaldo y que rebotó en la espalda de Pepe antes de introducirse en la portería para poner el 1-2 en el marcador. Un gol que le vendrá fantásticamente bien al luso para aumentar su confianza y volver por sus derroteros.
No obstante, el partido no terminó ahí pese a que Mourinho trató de meterlo en la cubitera con la salida de Lass y Granero. La Real Sociedad se fue arriba a buscar el empate con toda su alma y apunto estuvo de conseguirlo en un centro que rebotó en Khedira y tuvo que salvar Casillas en última instancia. Los minutos finales, con la Real absolutamente volcada arriba, fueron un continuo de contraataques del Real Madrid que pudo poner varias veces el 1-3 por medio de Marcelo, Cristiano o Benzema.
Al final, 3 puntos que saben a gloria y que meten presión al Barcelona que visita el campo del líder. No será un partido que pase a la historia ni que deje tan buen recuerdo como el del Ajax, pero el Madrid supo sufrir hasta el final y tirar de oficio en una Liga en la que esos dos valores serán decisivos.
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